Considerando que un nuevo coronavirus, COVID-19, causa enfermedad infecciosa y se detectó por primera vez en la ciudad de Wuhan provincia de Hubei, China en diciembre del 2019. Los síntomas de COVID-19 incluyen fiebre, tos, falta de aire; los resultados han variado desde enfermedad leve a severa y en algunos casos, la muerte.
Considerando que los oficiales sanitarios chinos han reportado decenas de miles de casos de COVID-19 en China y, que al parecer, el virus se disemina de persona a persona. Las enfermedades de COVID-19, la mayoría asociadas con viajes desde Wuhan, también se reportan en crecientes números en ubicaciones internacionales incluyendo los Estados Unidos.
Considerando que el número de casos reportados de COVID-19 ha aumentado dramáticamente en un período breve de tiempo y el 30 de enero del 2020 la Organización Mundial de la Salud (WHO, según sus siglas en inglés) declaró que el brote es una “emergencia de salud pública de preocupación internacional”.
Considerando que los oficiales de la WHO ahora informan que la transmisión sostenida de humano a humano del virus está ocurriendo. Se ha documentado la transmisión por parte de personas asintomáticas. Se sospecha la transmisión comunitaria del virus en los Estados Unidos. Aunque la mayoría de personas infectadas con COVID-19 se recuperan de la enfermedad sin tratamiento especial, hay potencial significativo de infección grave y muerte.
Considerando que el 31 de enero del 2020 el secretario de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, Alex M. Azar II declaró una emergencia de salud pública en los Estados Unidos para ayudar a la comunidad sanitaria del país a responder a COVID-19.
Considerando que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, según sus siglas en inglés) determinaron que el virus representa una amenaza grave a la salud pública.
Considerando que el 2 de febrero del 2020, el gobierno federal inició la suspensión de la entrada de ciudadanos extranjeros quienes estuvieron en China en los últimos catorce (14) días. Se examina a los ciudadanos, residentes y sus familiares estadounidenses inmediatos quienes estuvieron en la provincia de Hubei y otras partes del continente chino al entrar a los Estados Unidos. Se les permite a las personas sin síntomas provenientes de partes de China (aparte de la provincia de Hubei) a continuar a su destino final. Sin embargo, se les solicita ponerse en cuarentena en coordinación con los oficiales locales de salud pública durante hasta catorce (14) días. Actualmente, hay un centro de cuarentena federal en Travis Air Force Base para personas que viajan de Wuhan.
Considerando que el 27 de febrero del 2020, los CDC emitieron nuevas directrices de evaluación para COVID-19 a personas que padezcan de fiebre y/o signos/síntomas de enfermedades respiratorias (por ej., tos, dificultad para respirar) con antecedentes de viajes a China, Irán, Italia, Japón y Corea del Sur y pacientes con fiebre y enfermedad respiratoria aguda grave (por ej., neumonía, SIDA) que requieran hospitalización y que no tengan un diagnóstico alternativo explicable (por ej., influenza).
Considerando que hay ochenta y seis (86) casos confirmados de COVID-19 y dos (2) muertes confirmadas en los Estados Unidos, así como ochenta y ocho mil novecientos treinta (88.930) casos confirmados de COVID-19 y tres mil (3.000) muertes en todo el mundo.
Considerando que hay dos (2) casos confirmados de COVID-19 en el condado de Sonoma.
Considerando que habrá más casos confirmados en el condado de Sonoma a causa de la transmisión comunitaria no relacionada con viajes. Esto se debe al aumento de estos casos en el país, en combinación con la diseminación descontrolada mundial de COVID-19.
Considerando que la Sección 101080 del Código de Salud y Seguridad le permite a un oficial de salud declarar emergencia local de salud en su jurisdicción, o cualquier parte de esta, cuando el oficial de salud determine de manera razonable que existe una amenaza inminente y próxima de la introducción de cualquier enfermedad contagiosa o infecciosa.
Considerando que esta declaración le permite al Condado responder de manera más efectiva al brote, buscar y utilizar ayuda mutua, tener la posibilidad de obtener reembolsos, y asegurar que los profesionales y proveedores de salud pública del Condado cuenten con todo el material necesario de protección posible para proveer atención de calidad y proteger a nuestra comunidad.
Ahora, por lo tanto, conforme la Sección 101080 del Código de Salud y Seguridad, la oficial de salud del condado de Sonoma declara que:
- La introducción potencial de COVID-19 al condado de Sonoma es una amenaza para la salud pública en el contexto de la Sección 101080 del Código de Salud y Seguridad.
- Se declara una emergencia local de salud en el condado de Sonoma comenzando en o alrededor de las 10:00 a.m. del día 2 de marzo del 2020.
Esta declaración permanecerá en vigor durante no más de siete días (7) a menos de ser confirmada por la Junta de Supervisores del condado de Sonoma.
Celeste Phillip, MD, MPH
Oficial de salud
Condado de Sonoma