En respuesta a la creciente demanda de pruebas, ante el actual incremento de casos de COVID, el Departamento de Servicios de Salud del Condado de Sonoma ha aumentado significativamente las oportunidades de hacerse la prueba a través de proveedores privados, lo cual libera a Salud del Condado para en su lugar enfocarse en las pruebas de vigilancia y para evitar los brotes.

Con los casos de COVID-19 aumentando localmente y una mayor circulación de la altamente transmisible variante Delta, los Condados de Alameda, Contra Costa, Marín, San Francisco, San Mateo, Santa Clara, Sonoma y la Ciudad de Berkeley recomiendan que todos, sin importar el estatus de vacunación, utilicen un tapa bocas en interiores cuando estén en lugares públicos, para asegurar una sencilla verificación de que todas las personas no vacunadas tienen tapa bocas en esos lugares y como una precaución adicional para todos.

Hasta ahora el Condado de Sonoma ha brindado $2.678.957 en asistencia para más de 1.450 residentes, gracias al Programa de Asistencia de Emergencia para el Pago del Alquiler (“Emergency Rental Assistance Program” o ERAP)

Con más del 70 por ciento de los residentes del Condado de Sonoma ya habiendo recibido al menos una dosis de la vacuna de COVID-19, el Condado y sus colaboradores en los sistemas de atención médica cerrarán algunos de sus puestos de vacunación a gran escala en las próximas semanas, para dedicarse a llegar a las poblaciones difíciles de alcanzar, anunciaron hoy los funcionarios de salud. El cambio estratégico hacia clínicas más móviles y temporarias se produce cuando el Condado de Sonoma está intentando lograr la inmunidad colectiva, al hacer que la vacuna llegue a tantos de sus habitantes como sea posible.

Siete de cada diez adultos del Condado de Sonoma a partir de los 16 años ya han recibido al menos una dosis de la vacuna contra COVID-19, y se han dado más de 500.000 dosis a los residentes, anunciaron hoy los funcionarios de salud del Condado.

El Condado de Sonoma ha contratado al Holiday Inn en Windsor para brindar un refugio temporal a las personas sin hogar que son más vulnerables al COVID-19